Patinetes eléctricos, pista libre para rodar por el vacío legal

También denominados hoverboards, son vehículos giroscópicos eléctricos de dos ruedas con los que sus conductores se desplazan por la ciudad sin más límites que los de un peatón cualquiera.

Sobre el papel vehículos, prácticos y divertidos pero que pueden alcanzar velocidades de hasta veinticinco kilómetros por hora. Su proliferación en estos últimos años, el desconocimiento de los peatones y en ocasiones escasa destreza por parte de sus conductores hace que se produzcan cada vez más accidentes. Como por ejemplo el atropello del atleta Usain Bolt por un Segway o el ocurrido en Badajoz, donde un terrible accidente acabó con la vida de un niño que circulaba con un patín eléctrico con adaptador para ir sentado.

Este suceso hizo que la DGT de Cáceres pidiera una regulación del uso de los patines eléctricos.

Falta de normativa para el uso del patinete eléctrico

A pesar de estos hechos y las numerosas quejas de los peatones por las molestias que les produce la circulación de los patinetes eléctricos en las aceras, a día de hoy existe un vacío legal sobre su utilización en la mayoría de la ciudades.

La competencia para su regulación es de ámbito municipal, por lo que son las ciudades las que tienen que preocuparse por establecer unas normas que permitan su correcta utilización.

En urbes como Madrid no existe por ejemplo un censo de Segways o hoverboards, ni una normativa que indique cómo debe circularse por la ciudad con estos patinetes eléctricos. Algo que sin duda, debido al aumento constante del uso de este tipo de vehículos, deberá cambiar para adaptarse así a los nuevos tiempos.

En ese aspecto Barcelona sí ha hecho los deberes y ha aprobado ya una nueva normativa en la Ordenanza de Circulación de Peatones y Vehículos que regula la circulación de patinetes eléctricos y/o monociclos. Su objetivo es fomentar una movilidad sostenible pero segura del espacio público, donde se respete tanto a los peatones como a estos nuevos conductores.

En Sevilla, el Nuevo Plan de la Bicicleta 2020 tiene entre sus objetivos la elaboración de una normativa municipal que indique detalladamente los lugares y requisitos necesarios para desplazarse con los diversos modelos de patinetes eléctricos existentes.

Entre de las opiniones surgidas en las capital hispalense sobre cómo debe ser la regulación de estos ingenios mecánicos, asociaciones ciclistas como A Contramano, integrada en otras asociaciones a nivel europeo, se manifiesta contraria a que los patinetes eléctricos circulen por el carril bici, pues éste debe ser destinado a transportes que promuevan el ejercicio saludable. Algo en lo que no coinciden con los usuarios de los mismos, que opinan que es el lugar más seguro para circular, además de ser transportes más económicos y manejables que las bicicletas eléctricas.

También hay que tener en cuenta que los conductores de patinetes eléctricos pueden provocar accidentes de diversa índole en los que necesitarán el asesoramiento de abogados de accidentes de tráfico. Nacerá sin duda un nuevo ámbito legal en el que aplicar la normativa que aún está por llegar.