Tropezó con unos andamios y acabó en juicio: el caso real que destapó un grave fallo urbano en Santander

El insólito caso de la calle Burgos: cuando un paseo tranquilo acaba en juicio

Caminar por una ciudad debería ser una experiencia segura. Sin embargo, no siempre es así. En este artículo te contamos un caso real ocurrido en Santander, donde un simple paseo por la céntrica calle Burgos terminó con un accidente, una visita al hospital… y una batalla legal que finalmente se resolvió a favor de nuestro cliente.

El accidente: un riesgo inesperado en plena acera

Todo comenzó con lo que parecía una caminata habitual. Un ciudadano transitaba por la calle Burgos, una zona peatonal muy concurrida en Santander, cuando tropezó con unos andamios que habían sido dejados en el suelo sin ningún tipo de señalización o advertencia, justo en el paso peatonal.

La caída le provocó lesiones serias que requirieron atención en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Pero lo que parecía un incidente aislado se convirtió rápidamente en un caso legal complejo.

El juicio: ¿negligencia del peatón o falta de señalización?

Durante el juicio, una testigo clave confirmó que los andamios estaban en el suelo sin vallas, cintas ni elementos que alertaran del peligro. Sin embargo, el juez planteó que el accidentado podría haber evitado el obstáculo si hubiera estado más atento, considerando que la acera era lo suficientemente ancha como para sortearlo.

Aquí fue donde nuestro equipo legal dio un giro clave al caso. Argumentamos lo siguiente:

  • Al tratarse de una zona de tránsito exclusivamente peatonal, las personas tienden a caminar con mayor confianza y menor nivel de alerta, lo cual hace aún más importante la señalización de cualquier riesgo inusual.

  • Aunque no existía una normativa específica que regulara la colocación de los andamios en esa situación, sí existe una obligación general de prevenir riesgos evidentes para los viandantes.

La resolución: una indemnización justa

Tras una defensa firme y bien fundamentada, el tribunal dio la razón a nuestro cliente, quien obtuvo una indemnización de más de 8.000 euros. Esta resolución no solo compensa el daño sufrido, sino que también envía un mensaje importante sobre la responsabilidad en espacios públicos.

La importancia de una defensa experta

Casos como este demuestran que los accidentes urbanos no son solo “mala suerte”. Muchas veces, hay responsabilidades claras detrás de situaciones que parecen cotidianas. Por eso, contar con un equipo legal comprometido, con experiencia en responsabilidad civil y defensa del peatón, puede marcar la diferencia.

En nuestro despacho, trabajamos para que los derechos de nuestros clientes se respeten y para que cada caso sea atendido con la máxima dedicación. Si has sufrido un accidente similar, no estás solo: estamos aquí para ayudarte.